Hola de nuevo!
Última receta del año ¿y qué preparo después de este año 2020? Pues no se me ha ocurrido nada mejor que poneros una tarta, porque seguro que algo bueno ha pasado y aunque sea poco y minúsculo ¡Hay que celebrarlo!
Hoy preparamos “Tarta Red Velvet”
Ingredientes (3 pisos de 18cm)
- 2 huevos XL
- 320gr de azúcar blanco
- 250ml de leche entera o semidesnatada
- 120ml de aceite de girasol
- 300gr de harina normal multiusos
- 1 cucharada de aroma de vainilla
- 2 cucharadas de cacao desgrasado en polvo
- 1 cucharadita de zumo de limón
- 1 cucharadita de colorante alimentario rojo intenso
- 1 cucharadita de bicarbonato
- 2 cucharaditas de vinagre blanco de manzana
Ingredientes frosting/crema de mantequilla
- 150gr de mantequilla a temperatura ambiente
- 300gr de azúcar glas
- 180gr de queso crema (tipo Philadelphia)
Elaboración
- Comenzamos mezclando el zumo de limón con la leche. Veréis que la leche se corta y se queda grumosa, es eso lo que buscamos para sustituir la buttermilk original de la receta. Reposar 10-15 minutos.
- En un bol con ayuda de unas varillas eléctricas vamos a mezclar el azúcar junto con el aceite, los huevos y el aroma de vainilla. Batiremos hasta que tengamos una mezcla blanquecina y un poquito espumosa.
- Agregamos entonces la leche con el zumo de limón y removemos con una espátula.
- Ponemos en un colador la harina y el cacao y tamizamos a la vez que lo agregamos al resto de ingredientes. Mezclaremos con ayuda de la espátula y con movimientos envolventes. Importante tamizar para que no queden grumos.
- Añadimos ahora el colorante rojo. Con una cucharadita será más que suficiente para colorear toda la masa, debéis ser pacientes y remover bastante ya que al principio parece que no se tiñe, pero poco a poco va cogiendo color.
- Precalentamos el horno a 180ºC con calor arriba y abajo sin ventilador.
- Engrasamos los tres moldes con mantequilla y espolvoreamos un poco de harina por encima. También se puede usar spray desmoldante, aunque yo en este caso no lo usé.
- Por último, antes de repartir de la masa en los tres moldes, mezclaremos el vinagre con el bicarbonato. Veréis que reacciona rápidamente. Lo agregamos a la masa y removemos hasta que esté bien integrado. Este paso hay que dejarlo para el final.
- Repartís la masa en los 3 moldes a partes iguales y horneáis unos 25-30 minutos.
- Pasado el tiempo de horneado, retiramos del horno, desmoldamos y dejamos enfriar en una rejilla.
- Yo preparé los bizcochos el día anterior para asegurarme que estaban bien fríos a la hora de montar la tarta. Cuando se enfriaron en la rejilla los forré con papel film y los dejé toda la noche en la nevera.
- Para preparar la crema o frosting de mantequilla debemos tener la mantequilla a punto pomada (temperatura ambiente).
- En un bol ponemos la mantequilla y el azúcar glas y batimos con las varillas eléctricas. Esta vez, siento deciros que, es imprescindible usar varillas eléctricas si queréis una crema firme.
- Batiremos entre 15 y 20 minutos, a velocidad media hasta que veamos que se va volviendo cada vez más blanca.
- Una vez tengamos la mezcla consistente, añadiremos el queso crema y batiremos unos 5 minutos con las varillas.
- Metemos la crema a una manga pastelera y dejamos en la nevera un mínimo de 30 minutos.
- Por último, montamos la tarta. Para ello, ponemos un bizcocho en la bandeja donde vayamos a servir/transportar. Yo suelo recortar la montañita que le sale al bizcocho para que me queden iguales los tres y el corte del interior de la tarta quede uniforme. Con los recortes me hago un colacao y me lo zampo tan ricamente, ¡aquí no se tira nada!
- Cubrimos con una buena capa de frosting y repetimos la operación con el segundo bizcocho.
- Encima del tercer bizcocho me gusta decorarlo más crema de mantequilla, pero uso una boquilla rizada en la manga pastelera para que quede en forma de “flor”.
- En esta ocasión, añadí figuras comestibles de obleas como toque final de decoración.
- Si veis que entre piso y piso el frosting no está muy firme la crema, podéis meter la tarta unos 30 minutos al congelador entre capa y capa para ayudar a que la crema se solidifique rápidamente antes de poner el siguiente bizcocho encima.
Hasta la próxima!