Hola de nuevo!
Hoy os traigo una receta de pizza apta para celiacos. Ya son varias las entradas en el blog de este tipo y la verdad que, aunque no tienen el sabor de una pizza tradicional, a mí me parecen muy resultonas. Y para un capricho en el que no queramos acordarnos de las calorías, esta receta es perfecta. En esta ocasión tendremos una base con toques dulces que os puede sorprender.
Hoy preparamos “Pizza de masa de boniato con champis, pimiento y espárragos verdes”
Ingredientes (1 ración)
- 300gr de boniato pelado y crudo
- 30gr de almidón de yuca (yo lo encontré en la sección internacional de mi supermercado)
- 1 huevo tamaño L
- 1 bola de mozzarella fresca
- 6 champiñones
- 6 espárragos trigueros
- 1 pimiento verde pequeño
- 100gr de salsa de tomate
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta negra
Elaboración
- Precalentamos el horno a 200ºC con calor arriba y abajo y ventilador.
- Comenzamos preparando la masa. Para ello picamos el boniato en cubos y lo metemos en un bol tapado con film junto con 2 cucharadas de agua.
- Con ayuda de un palillo haremos varios aguajeros al film y lo meteremos al microondas durante 10 minutos a máxima potencia.
- En una picadora picamos el boniato que ya estará blandito, junto con el huevo y una pizca de sal.
- Sobre la bandeja de horno ponemos una lámina de papel vegetal y con ayuda de un pincel la pintamos de aceite de oliva, esto ayudará a que no se nos pegue la masa.
- Vertemos la mezcla de la masa sobre el papel absorbente y con ayuda del reverso de una cuchara le damos forma de círculo intentando dejar una fina capa de masa por toda la superficie.
- Cuando el horno esté caliente, horneamos a 200ºC durante 10 minutos. Estará lista cuando los bordes empiecen a dorarse.
- Dale la vuelta la masa y hornea 5 minutos más.
- Mientras se hornea la base, preparamos el resto de ingredientes. Picamos los champiñones en láminas y el pimiento en juliana. Picamos los espárragos en trocitos.
- Cuando tengamos la masa horneada, sacamos del horno y montamos la pizza.
- Primero colocaremos la salsa de tomate. Si es casero, os aconsejo que lo coléis unos minutos antes para quitar el exceso de agua que pueda tener.
- Después colocamos los diferentes ingredientes y el queso en trocitos en último lugar.
- Molemos un poco de pimienta negra y echamos un chorrito de aceite de oliva virgen extra por encima.
- Horneamos unos 10 minutos, hasta que veamos que el queso está completamente derretido y ha comenzado a gratinarse.
- En mi caso, al sacarla del horno le puse unas gotitas de aceite picante ya que me parece que con la textura grasa del queso combina ideal con el picante.
- Servimos al momento.
Hasta la próxima!